Editorial del Programa de Radio Voces y Política, 28 de abril, 2021

El martes 27 de abril del 2021 el Ministro de Salud, Dr. Daniel Salas, informó al país del mayor registro de contagios en un solo día 2000 personas.  Esta cifra es realmente alarmante.

Un año después de la aparición del caso índice por SarsCov2, el país se encuentra a las puertas de un contagio exponencial y del colapso de la capacidad hospitalaria para la atención de esta crisis sanitaria.  Sobre todo, la disponibilidad de respiradores y Unidades de Cuidados Intensivos.  Para el luchador y sacrificado personal de atención de la emergencia una situación así significa empezar a decidir entre dejar vivir y dejar morir.  Hemos visto con angustia y estupor escenas dramáticas de muertes colectivas en la India producto de la Pandemia en las últimas semanas. Como sociedad, ¿Estamos dispuestos a pasar por este trance?

Lo cierto del caso es que desde que iniciaron los protocolos de apertura, en junio 2020, la curva de contagio no ha dejado de crecer y no se ha aplanado. La incapacidad individual y colectiva para armonizar contención sanitaria y dinámica económica nos ha caracterizado. El gobierno, diputados y empresarios han impulsado proyectos de ley que van en contra de la lógica de atención de la pandemia.  La ideología del Déficit Fiscal ha dominado las acciones gubernamentales y limitado la puesta en marchad de acciones de gasto público en la lógica de la contención.  La salud económica ha privado a la salud humana.  La ha restringido y secuestrado.  a necesidad voraz de una élite por “disciplinar” al díscolo sector público e impulsar el proyecto privatizador ha dominado la agenda de atención a la pandemia. Ha fomentado el individualismo.  ¡No te la juegue! Es la última campaña que importantes grupos empresariales están promoviendo.  

Realmente esta crisis es un asunto estrictamente personal/ individual? No lo es. Es una responsabilidad colectiva y comunitaria.

Los fuegos electorales se han abierto en medio de la pandemia. Algunos candidatos están llamando a la privatización de la atención de la crisis sanitaria.  Están promoviendo la idea de que las farmacéuticas y el sector de la salud privada son mas eficientes en la adquisición y vacunación de los que pueden pagar.  Miembros del Gobierno han invitado “a los que puedan” a viajar al exterior a vacunarse. Es decir, la pandemia es un negociazo.  Una verdadera mina de oro para las grandes farmacéuticas que han multiplicado por miles de miles de millones de dólares sus ganancias en los últimos 6 meses.  Atención de la emergencia y negocio del que podrían estar quedando fuera las empresas privadas de salud.

Mientras tanto los efectos de la crisis del COVID en las condiciones sociales de cientos de familias empiezan a ser evidentes. Crecimiento de la pobreza llegando a un 26% y crecimiento de la pobreza extrema.  Sectores vulnerables como el empleo femenino altamente impactado con las consecuentes cadenas de situaciones de violencia hacia esta población. Una alta tasa de desempleo de un modelo económico que si no se reconvierte será insuficiente para iniciar con la recuperación productiva y crear empleos.  El país en un año ha retrocedido 5 años en calidad de vida según lo expresa el Proyecto del Estado de la Nación.

Insistimos.  Hoy el país es menos democrático y más desigual.

La CCSS, institución baluarte en la atención de la crisis, se sigue desfinanciando y pronto las voces del odio de lo publico iniciarán su campaña en contra de esta institución por su incapacidad de entregar un buen servicio.  El llamado a la tercerización de la atención de salud y seguridad social recobrará fuerza.

 El gobierno del PAC sigue demostrando su predilección por la agenda neoliberal entregando a sectores que defienden intereses particulares bienes comunes como el control ambiental (SETENA), la capacitación técnica del INA, la no ratificación del Acuerdo de Escazú, la privatización del agua, el financiamiento de préstamos para educación, servicios estratégicos del IMAS, el control del espectro electromagnético, y podemos seguir con una lista que día a día se va engrosando.

En este contexto se ha traslapado la elección del ultimo directorio legislativo de este cuatrienio.  El Partido Liberación Nacional seguro volverá a retomar la presidencia del directorio con el apoyo de los partidos pentecostales, la mayoría del PUSC y los llamados independientes.  Estratégico para este partido que con el pretexto del control político buscará seguir disminuyendo la “posibilidad” de una tercera administración del PAC.

No parece que se den sorpresas más allá de la inédita elección de un primero de mayo en formato virtual.  Este ambiente legislativo, atravesado por el contagio con COVID-19 de diputados y diputadas, es el que permanecerá apto para la votación afirmativa de la Ley de Empleo Público y el Préstamo con el FMI en las próximas semanas.  Empleo Público que tendrá su ultima prueba de fuego en la Sala Cuarta luego de que se vote en primer debate.  Ambos proyectos favorecidos con la enorme desmovilización social de la que estamos siendo víctimas y de la cual no parece forma de como activarla.