Extracto: Una Vicerrectoría de Acción Social que procura ser cómplice en el debilitamiento y desmembramiento de los programas; al concebirlos como una simple suma de proyectos, invisibilizan su proyección de acompañamiento e intervención articulada, implantando una acción social reducida a la gestión administrativa; con estas decisiones y sumado a las omisiones intencionadas, dejan entrever la influencia corporativa al ejecutar disposiciones en consonancia con el debilitamiento y fragmentación institucional, en clara contradicción de la concepción de la acción social como pilar de la Universidad.

Pueden leer el artículo completo aquí

Prosokioc