El próximo jueves 23 y viernes 24 de junio, se estará llevando a cabo el curso de Ecología Política Feminista, el cual tendrá un enfoque teórico práctico. El mismo, será impartido por Diana Ojeda, quien es economista, geógrafa y docente en la Universidad de Los Andes. El quehacer de la Dra. Diana Ojeda articula la ecología política, la geopolítica feminista y los estudios de la ciencia en el estudio de los conflictos socioambientales, en particular en relación con proyectos de conservación ambiental, mitigación del cambio climático y turismo de naturaleza. Su trabajo centrado en el Caribe Colombiano se enfoca en dinámicas y procesos de despojo, extractivismo agrario, securitización y formación estatal desde una perspectiva feminista.

Por otra parte, en el marco del curso en la sesión práctica se realizará una gira a África de Guácimo, en la cual participará en su facilitación Erlinda Quesada, lideresa comunitaria y parte de la Asociación de Mujeres Unidas de África (AMUDA) y del Frente Nacional de Sectores Afectados por la Producción Piñera (FRENASAP), organizaciones que se han enfrentado a conflictos socioambientales. En este espacio se continuará dialogando alrededor desde una experiencia concreta lo discutido en teoría y enriquecido desde las vivencias de las comunidades.

La Finca Educativa AMUDA de la Asociación de Mujeres Unidas para el Desarrollo de África es un proyecto de conservación y turismo comunitario de este colectivo de mujeres fundado en 1997. Durante el curso se podrá conocer la historia de este grupo, así como hacer una caminata por sus senderos. La Asociación AMUDA ha sido clave para la capacitación y sensibilización para estudiantes que han aprendido sobre la historia de las mujeres en las luchas socio ambientales y laborales del Caribe.

África de Guácimo es una comunidad a un kilómetro del centro de cantón que tiene el nombre del continente del cual procedían los antepasados de los primeros habitantes del pueblo. Nació con la construcción del ferrocarril al Caribe y el surgimiento del cultivo de banano. Los primeros habitantes procedían de las islas de Caribe como Jamaica, Barbados y Trinidad y Tobago.

Esta comunidad y en específico su acueducto y tomas de agua, se vio impactada por una plantación de piña que se ubicó en las partes más altas de la misma. Ante esto, es importante reconocer la lucha histórica que se dio en la comunidad, pues fue la primera en demostrar científica y legalmente que tal empresa había incumplido la normativa ambiental.

Para esta lucha, el papel de La Asociación de Mujeres Unidas para el Desarrollo de África (AMUDA), fue determinante, pues ha realizado un importante trabajo de fortalecimiento de las luchas socioambientales y comunitarias. Estas, se encuentran relacionadas con la protección de aguas y de las zonas altas de recarga del cantón de Guácimo, a partir de la moratoria  “a la siembra y establecimientos de nuevas áreas  de explotación, producción y agro industria de monocultivos extensivos e intensivos, así como cualquier proyecto de impacto y explotación hidroeléctrica sobre los cauces de ríos y  quebradas, en la parte sur de nuestro Cantón, exactamente a partir de 1 kilómetro arriba  de la ruta 32 en adelante(…).”                                                                                                                                                            

Otra de las luchas que AMUDA ha acompañado es la defensa y la gestión del acueducto en la comunidad vecina de la Perla, donde cada persona de la comunidad trabajo un promedio de 300 horas para cavar y meter tubos desde la montaña hasta llevar el agua a cada casa. En esta zona todo cuesta y todo esfuerzo, la iglesia, el salón comunal, el acueducto ha sido una lucha donde las mujeres son lideresas claves. Hay otras luchas importantes socio ambientales como la defensa del río Parismina y otras de los últimos años por la defensa de los bienes comunes comunitarios donde AMUDA ha sido clave para el cambio social y mejorar la calidad de vida.

¿Qué es la ecología política?, como un campo teórico y práctico, asume en su investigación el compromiso de no dejar pasar las relaciones de poder existentes entre la sociedad, la cultura, la naturaleza y la economía. En ese sentido, desde la ecología política feminista se aumenta un compromiso, alrededor de estos temas y su vínculo con las epistemologías feministas y las desigualdades que se dan a partir del género en el acceso, distribución y uso de los recursos. La Ecología Política Feminista permite identificar ciertas concepciones donde se dan prácticas dominantes de conocimiento y también de autoridad, a su vez, se enfoca en buscar formas de investigación y praxis donde se promueve la transformación social desde una perspectiva ecológica para las mujeres y otros grupos que han sido históricamente marginalizdos.

Este curso, está siendo organizado por el Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP), en conjunto con el proyecto Conflictividad socio ambiental e impactos de las piñeras en la zona norte (EC-495) inscrito en el Centro de Investigaciones Antropológicas (CIAN) y el proyecto Geografía y Diálogo de Saberes (ED-3526) inscrito en la Escuela de Geografía, ambos del Programa Kioscos Socioambientales de la Vicerrectoría de Acción Social. 

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